Tan pronto como las partes involucradas hayan aceptado la mediación, nosotros, como mediadores, iniciamos las negociaciones preparatorias. Para ello, primero resumimos las características, funciones y el desarrollo de la sesión y lo comentamos previamente.

Para llegar a un acuerdo sobre una base común, primero se discuten los temas de la negociación. De esta forma se evitan malentendidos y se cierran lagunas de información. Durante el proceso de balance se crea así un entendimiento común.

En la función de mediador, vamos entonces en busca de los intereses de ambas partes e intentamos llegar a un acuerdo adecuado. De esta manera, se puede desarrollar una base uniforme para satisfacer todas las necesidades.

En la cuarta fase, todos los implicados reúnen las que consideran soluciones adecuadas. En el Brain Storming se recogen todas las ideas imaginables para seleccionar las opciones adecuadas. De esta manera obtendrá el máximo beneficio.

Una vez que se hayan discutido y evaluado todas las ideas, podremos decidir junto con usted las soluciones más adecuadas. Por supuesto, estos se certificarán ante notario y proporcionarán una base jurídica vinculante, sin necesidad de un largo proceso judicial.